Trabajar en un negocio familiar, donde no existe distinción entre trabajadores y familia, donde puedes sentirte cuidada y protegida, y contar con tus jefes y con tus compañeros ante cualquier necesidad, es un lujo.
Esta es la suerte que ha corrido una de nuestras mujeres, quien ha vuelto a ser contratada en un chiringuito de la costa de Huelva, donde ha estado trabajando varias temporadas seguidas, pero que el pasado año tuvo que interrumpir, por encontrarse en su país.
Además de ofrecerle un empleo digno, le proporcionan alojamiento durante el tiempo que dura la temporada de verano, la apoyan, se preocupan por su situación y la de su hijo, y están procurando encontrar un empleo y un alojamiento para cuando finalice la época estival.
Esta mujer, dada de baja en el recurso en el mes de julio con un cumplimiento excelente de su itinerario, ha logrado fortalecer y consolidar su red de apoyo gracias al empleo, sigue en contacto permanente con las profesionales de DAJMA y su objetivo es intentar afianzarse en la provincia de Huelva, objetivo que estamos seguras de que cumplira con creces.