Vuelta a la rutina en PAI Cádiz

El  mes de septiembre significa la vuelta a la rutina, despedir a esas noches largas de verano y gentío que alborotan el ambiente veraniego, playas, fiestas y un sin fin de etc.

Es tiempo de centrarse y seguir avanzando, formarse, incorporarse al trabajo o a nuevas experiencias laborales que abran puertas a otros espacios que ayuden a crecer como persona en todos los ámbitos.

Y en este punto es donde encontramos a nuestros jóvenes; en ese camino de la vida, que te ofrece diferentes posibilidades para madurar y poder decidir de entre ellas, la más correcta y adecuada a su situación. Es el caso, de un chico cuya capacidad de aprendizaje se centra en el sector de la Hostelería, en concreto en la “cocina” adaptándose a las nuevas circunstancias que requiere la incorporación a una nueva empresa, compañeros, jefe, clientela y dinámica de trabajo. Su interés por seguir  aprendiendo a pesar de las dificultades que ello conlleva, es donde radica su potencial y de donde obtienen la fuerza necesaria para no perder de vista los objetivos que se marcaron cuando emprendieron el largo viaje que le trajo a nuestro país.

El trabajo, la formación continua que les facilitamos desde nuestro proyecto junto con la de otras entidades, tanto públicas como privadas, sus amigos, el tiempo de ocio y el contacto con sus familias en la distancia, son los factores principales que nutren el día a día de los chicos y que les sustentan como pilar para mejorar en sus tareas y no rendirse jamás.

Es por eso, y mucho más, que desde aquí, y a todos aquellas personas conscientes del gran esfuerzo que supone para ellos y la satisfacción personal que obtienen, les ofrezcamos nuestro reconocimiento y nuestro apoyo durante todo ese camino lleno de dificultades y alegrías, que en definitiva les brinda la vida que han elegido.

“Quien tiene un porqué para vivir, encontrará casi siempre el cómo”

 NIETZSCHE